Por qué elegir un seguro a través de una corredora
Contratar un seguro directamente con una compañía aseguradora y contratarlo por medio de una Corredora de Seguros tiene algunas diferencias y lo fundamental es la asistencia y asesoría que recibes de los expertos
- Asesoramiento. La Corredora de Seguros mantiene su total independencia e imparcialidad a la hora de seleccionar las mejores condiciones para las reales necesidades de su cliente.
- No estás solo o sola. Una de las funciones básicas de la corredora es representar y defender estrictamente los intereses del cliente frente a las aseguradoras. El corredor negociará cualquier problema que haya entre la compañía y el cliente por el bien de ambos.
- Experiencia. En una Corredora de Seguros se dispone del conocimiento y la experiencia única y experta para llevar a cabo este trabajo. Los corredores son formados en materia financiera, legislativa y aseguradora para satisfacer plenamente las necesidades del cliente.
- Asistencia frente al siniestro. La corredora no se limita a vender un seguro y dejar al cliente. Le asiste de manera constante, revisando que la póliza siga adaptada a sus necesidades y pendiente de las novedades legislativas que puedan ocasionar problemas que no estén cubiertos.
- No hay costos adicionales. Es la compañía aseguradora con la que se contrate la póliza la que le otorga un porcentaje al corredor que ha tramitado el seguro. El corredor no supone ningún gasto para el cliente a pesar de todo el trabajo que conlleva este proceso.